viernes, 20 de mayo de 2011

Caminar


Viernes, 20 de mayo de 2011

El brillo de sus ojos se ha marchado
La cadencia de sus palabras aburría
y el temor se dejaba ver entre sus manos.
Ya no respiraba, se limitaba a dejar que la inercia
guiara el movimiento de sus pulmones.
Se preguntaba cómo y por qué
Pero en el fondo sabía...
Que no tenía sentido preguntar.
Comprendió que su destino no era más...
Solo un conjunto de decisiones,
Un trayecto limitado de eventos desafortunados,
O mejor, el camino que sin darse cuenta fue forjando.
Nadie es de un día para otro,
Nadie se forja después de una noche nevada.
Algunos tienen la dicha de abrir sus ojos
Y contemplar un mundo girando en torno a ellos...
Otros en cambio deben desenvainar la espada a diario
Y dar forma a aquel futuro incierto...
Ya ni siquiera era capaz de interactuar,
Solo contemplar, o solo caminar...
Sí, gustaba caminar, dejando a su paso huellas 
en las hojas otoñales
que a nadie le importaba recoger.
Estaba ahí, solo frente a su destino,
Solo frente a todo y todos.
Dejando la añoranza y viviendo los segundos,
Procurando más y más disfrutar el respirar,
Sonreír bajo la lluvia, hacer sonreír a los demás...
Comprendió que eso era vivir...
Aunque en el fondo sabía que reír no era ser feliz
Pero estaba seguro que llorar no era morir... 
Y que el pasado gris podía tornarse en alegría.

J.C.