martes, 1 de noviembre de 2011

Alrededor de las personas





Miércoles, 14 de septiembre de 2011, 1:42


¿Cuán solos estamos en este mundo? ¿Será acaso que no hay nadie que realmente podamos conocer a fondo? O tal vez el egoísmo e individualismo nos hace preocuparnos sólo de nosotros mismos sin ser capaces de mirar al prójimo, al hermano o al padre con empatía y deseos de entregar. Quizás sea porque al dar, entregas vida, tiempo, parte de ti, y la naturaleza humana anhela retener todo para sí. El hombre y su naturaleza quiere atención, aceptación y simpatía.. Tal vez es por lo mismo que dicen que el chileno es chaquetero, y cuando alguien es frontal o directo cae mal en nuestra idiosincrasia. Las redes sociales, querámoslo o no, son solo un dejo de orgullo, un grito desesperado de atención como diría Jodorowsky, una necesidad de hacerse notar, tejer tu identidad en un "perfil" con foto perfecta, bien encuadrada, que muchas veces no hace honor ni un ápice de tu realidad. La primera transgresión en el universo fue cometida por Lucero, un querubín hermoso que quiso ser igual a Dios, y en su orgullo pereció. Y esa transgresión permanece fecunda y latente hasta nuestros días. 
Cuan distinto es cuando pensamos en Dios que entregó todo por amor a nosotros, por amor a ti y a mi, se despojó de todo lo que tenía, de su honor y comodidad, de su mismo trono y Padre para allegarse a nosotros como el Salvador. 

La gente está cada vez más esceptica a lo espiritual, en nuestros días domina el materialismo en todos sus sentidos... no solo en tener cosas y desear adquirir muchos bienes y logros, sino también en que la industrialización y la modernidad nos ha hecho olvidar que practicamente todo lo que vivimos, vemos y experimentamos tiene más espiritualidad de la que la gente quiere creer. Si hablas de Masones eres un tonto que cree en conspiraciones, pero si miras más allá, podrás ver que estamos rodeados de símbolos (aún en las marcas y logos publicitarios) con trasfondos netamente ideológicos y con significados en muchos casos espirituales. 

Para no seguir desviándome del tema...
El materialismo y el orgullo imperan y tu eres responsable de hacer que eso en TU ENTORNO, en tu realidad, cambie. Pasa más tiempo con tu familia, valórala, ámala... Procura retribuir a tus padres por todo lo que hacen por ti, y si no los tienes, hazlo con quienes te aman y cuidan. Busca a Dios, que es el único que estará siempre ahí para ti, aún más que tu familia... Forja un carácter, aunque te cueste, véncete a ti mismo en aquello que te daña o dañe a otros. Entrega más de lo que recibes y aprovecha tu vida mientras tengas tiempo, porque no importa cuan famoso, rico, guapo o joven seas... cuando menos lo esperes tu vida puede esfumarse. Así que ocúpala para trascender a través de otros con la ayuda de Dios.


"Quién sabe si vivimos siempre nada más
que alrededor de las personas, aun de
aquéllas que viven con nosotros años y
años, y a quienes, debido al trato frecuente
o diario y aun nocturno, creemos que
llegaremos a conocer íntimamente;
de algunas conocemos más, de otras menos,
pero sea cual fuere el grado de conocimiento
que lleguemos a adquirir, siempre nos
daremos cuenta de que reservan algo que es
para nosotros impenetrable y que quizás
les es imposible entregar:
lo que son en sí y para sí mismas,
que puede ser poco o que puede ser mucho,
pero que es: ese oculto e invisible núcleo que
se recoge cuando se le toca y que suele matar
cuando se le hiere."

MANUEL ROJAS, Hijo de ladrón




No hay comentarios: