martes, 1 de noviembre de 2011

Su necio corazón fue entenebrecido

Martes, 10 de marzo de 2009, 1:18


Mirando videos en youtube, tratando de encontrar el video que mostró el pastor Claudio Villarroel en Lican Ray, me encontré con un video que se llamaba: “falsedades bíblicas”... En el que se refutaban algunas profecías bíblicas y verdaderamente es triste ver como algunas personas se esmeran en buscar destruir y atacar la Palabra del Señor... Me hace recordar a Voltaire, el incrédulo francés, cuando dijo que la Biblia y el cristianismo desaparecerían en 50 años... irónicamente después de su muerte la Sociedad Bíblica de Ginebra compró su casa y usó su imprenta para producir grandes cantidades de Biblias... El emperador Diocleciano en el año 303 trató de exterminar a todos los cristianos y a la Biblia, pero unos pocos años después Constantino mandó a hacer ejemplares del nuevo testamento para todos en su imperio y ofreció una recompensa para todo el que localizara ejemplares de la Biblia... En menos de 24 horas llegaron a su poder 50 Biblias!!
Cuando veo cada barbaridad que se habla en contra del Señor y su Palabra me doy cuenta que verdaderamente me falta mucho que aprender y estudiar para así poder “estar siempre preparado para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo aquel que os demande razón de la esperanza que está en vosotros”... La Palabra de Dios es un verdadero yunque que despedaza todo martillo que contra ella se alze!!!
La Palabra de Dios se defiende por sí sola... pero es necesario estudiarla más profundamente... Escudriñarla, indagar diligentemente en ella, para que no seamos neófitos, sino entendidos en lo que a ella se refiere... motivo a cada uno de mis hermanos en Cristo a acercarse más a ella y poder así alcanzar la plenitud en Cristo, la que el quiere para nosotros...
Aprovechemos cada segundo para sumergirnos en su Palabra preciosa, para conocerle mejor, en ella está la mente del Señor...
1 Pedro 3:13-15 Romanos 1:18-22
Gracias Dios por salvarme y darme la posibilidad de conocerte!




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