jueves, 3 de noviembre de 2011

¿Discutamos? :)



Estudié Teología 4 años y obtuve mucho conocimiento, pero las cosas más maravillosas que he aprendido de Dios las he conseguido a través de lo cotidiano, en ayudar a otro, dar un consejo o expresar amor a quién lo necesita. Y me ha pasado en ambos sentidos, tanto dándo como recibiendo. 

¿De qué sirve conocer tantos pasajes bíblicos con cita y todo, entender complejas teorías Calvinistas o Arminianas, tener títulos honoríficos, o muchas otras cosas si el amor de Cristo no está verdaderamente arraigado en tu corazón?
Y sin querer caer en simplismos o una teología barata basada en el AMOR de Dios, he llegado a la conclusión de que este es el elemento vital que mantiene unida nuestra fe.

Las más grandes divisiones de la Iglesia no se han causado por diferencias teológicas (tecnicamente sí), sino por la falta de amor al hermano, de tolerar y soportarnos unos a otros. 
La Iglesia se ha convertido en algo parecido al matrimonio moderno: "si algo no me gusta, me voy y listo!"
Y lo peor es que no se van a otra Iglesia cristiana, sino que sencillamente no van.
Los ridículos debates que se suscitan a veces por cosas tan nimias, no pueden hacer más que dejarme perplejo. Reconozco que soy bueno para debatir, pero por un tema netamente de intercambiar posturas, lo encuentro enriquecededor, pero de ahí a enemistarse por causa de una visión diferente? No lo comprendo.

Producto de ello, perdemos tiempo valioso que podría ser ocupado en influir o impactar nuestro entorno con nuestras vidas... Ojalá aprendamos a ser más tolerantes los unos con los otros, y ojo, no con el pecado... no hablo de pasar por alto cosas que derechamente son pecaminosas sino en aquellas que no afectan nuestra Teología directamente y más que la "Teología", la Palabra de Dios pura y inalterable!   PONGAMOS ATENCION EN LO QUE ES UTIL Y NO PERDAMOS TIEMPO EN LO INNECESARIO, A MENOS QUE VALGA LA PENA.
El conocimiento no aplicado no sirve de nada, es sólo basura a cuestas.
Muestra tu amor. 

Con amor en Cristo
Jorge C.D.

Tito 3:8 Palabra fiel es esta, y en estas cosas quiero que insistas con firmeza, para que los que creen en Dios procuren ocuparse en buenas obras. Estas cosas son buenas y útiles a los hombres. 
3:9 Pero evita las cuestiones necias, y genealogías, y contenciones, y discusiones acerca de la ley; porque son vanas y sin provecho. 





No hay comentarios: